Irène Némirovsky

 Pilar Olmo

Elegí este libro por su brevedad. Sus 96 páginas me dieron la opción de poder escribir esta reseña y participar en la

Semana de las Letras. La autora del libro es Irène Némirovsky, (Kiev 1903-Auschwitz 1942).

Los Kampf viven modestamente en un apartamento, pero una inversión en bolsa hace posible que se conviertan en

–nuevos– ricos. Instalados en un lujoso piso de París, organizan un baile para doscientos invitados, un acontecimientoo que preparan con mucho esmero porque anhelan ser reconocidos por la alta sociedad parisina.

Pero en casa de los Kampf no todos comparten su entusiasmo. Su única hija, de catorce años, herida en su orgullo

por la negativa materna de asistir al baile, observa con amargura los preparativos de la fiesta. Antoinette siente que

ha llegado el momento de hacer frente a una madre autoritaria y ser ella la protagonista de su vida. Sus propósitos

serán alcanzados en un acto espontáneo no exento de ira, que tendrá como consecuencia un desenlace revelador y

ofensivo. El final es inesperado para los Kampf, e interpela al lector sobre la actuación de la joven. La sencillez

literaria del libro contrasta con un relato que está construido con una narrativa fácil de leer pero que, con unos

cuantos párrafos potentes, logra que el contenido de la obra posea un mensaje implícito sobre la conducta de la

adolescente. 

Fragmento.

En medio de la noche, unos sollozos en la habitación contigua despertaron a Miss Betty. Encendió la luz y escuchó un momento a través de la pared. Era la primera vez que oía llorar a la niña; cuando la señora Kampf la regañaba, por lo general, Antoinette conseguía tragarse las lágrimas y no decía nada.